* Poner en remojo la noche anterior 14 gramos de semillas de chía con los dos vasos de agua. Batiremos las semillas la mañana siguiente junto al agua (400 ml), el jugo de 1 limón y un trocito de jengibre rallado.
* Para multiplicar estos beneficios podemos rallar un poco de la piel del limón porque es más rica en nutrientes que el jugo.
* Si lo deseas, añade algún endulzante natural, como por ejemplo, panela.